En Noticias Telemedellín tenemos historias positivas. Esta ocasión conoceremos la de John Zapata, un floricultor que en los cultivos de flores encontró la forma de transformar su vida.
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Hace más de dos décadas, John llegó a una finca sin imaginar que sería el inicio de una vida dedicada al cultivo de flores. Comenzó regando unas pocas plantas, sin saber que con cada gota de agua estaba sembrando las raíces profundas de su futuro y el de su familia.
“Yo empecé fue aquí con las flores, yo no sabía nada de flores, yo trabajaba primero construcción, y después en un vivero y un señor que era el encargado en ese momento del cultivo me dijo que si quería trabajar con él y entonces ya vine acá y comencé a regar”, contó Jhon Zapata, floricultor.
La vida en el campo también le regaló el amor, no hizo falta flores en esta relación, sino que juntos con dedicación sembraron los pasos para conformar su hogar.
“Aquí ya conseguí la señora, mi esposa trabaja acá, he conseguido mi motico y tengo mis dos hijos, que el hijo mío trabajó acá y ya empezó a emprender en las flores y la hija también en este momento trabaja con flores. Porque yo en ese tiempo era el fumigador y entonces me daban tiempito libre, y ella era sembradora y yo me iba a ayudarla a sembrar hasta que me puse a sembrar con ella”, detalló.
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El amor por las flores traspasó de generación en generación, hoy en día su hijo y su hija se dedican con pasión a esta gran labor.
Hoy después de 21 años, John Zapata sigue llegando puntualmente a las seis de la mañana, con una sonrisa riega, siembra y transmite el amor por las flores. Las mismas flores que les han dado trabajo y amor.