Tras el reporte de sobreocupación de los servicios de urgencias hasta en un 208% en hospitales de Medellín, como el San Vicente Fundación, y hasta un 316% en la red de Metrosalud, como la U.H. San Javier, la Alcaldía presentó avances de una herramienta tecnológica que aporta en la mitigación de esta problemática.
Se trata del Centro Integrado de Gestión al Acceso (CIGA), una iniciativa que permite organizar y garantizar la atención para los miles de usuarios que asisten a los centros de salud con diferentes enfermedades, ya que, gracias a ella, se puede determinar cuándo se trata de una urgencia vital.
En caso de que no lo sea y el motivo de consulta esté valorado en triage 4 o 5, la herramienta le asigna a la persona una cita en la red de la EPS o en un punto cercano a su residencia, facilitando una atención adecuada, según la condición clínica, y la desaturación de los servicios de urgencias.
“Gracias a esta estrategia, desaturamos los servicios de urgencias, que podrían estar peor de lo que hoy se encuentran. Esta saturación, en promedio, en las instituciones de alta complejidad, con corte al 31 de julio, ha estado alrededor del 118%. Si no contáramos con el CIGA, estaríamos alrededor de un 150%”, explicó Natalia López, secretaria de Salud de Medellín.
En cuanto a salud mental, el CIGA logró direccionar a 688 pacientes este año, mientras que en población materna y pediatría se garantizaron 39.438 y 32.445 citas, respectivamente.
Cabe resaltar además que, según el reporte de las autoridades, con la herramienta se ha conseguido reducir en un 32% la saturación en urgencias, beneficiando a más de 200 mil pacientes con una atención más ágil y cercana.