Hasta hoy las víctimas reconocidas en procesos de Justicia y Paz han recibido 54 mil millones de pesos en indemnizaciones por hechos victimizantes. La gran mayoría de ese dinero, que debería haber sido entregado por los victimarios, ha sido pagado de los impuestos que a diario pagan los colombianos. Hoy, los bienes entregados por los desmovilizados sólo cubren el seis por ciento de los recursos requeridos para la reparación de las víctimas.