El secretario de Seguridad de Medellín, Gustavo Villegas, se entregó a la autoridades y renunció a su cargo luego de que la Unidad de Crimen Organizado emitiera una orden de captura en su contra.
Supuestamente, Villegas habría tenido contacto con líderes de la Oficina de Envigado, entre ellos, alias Pichi y alias Julio Perdomo con el propósito de favorecer la entrega de integrantes de esa estructura criminal ante la justicia.