Desde el próximo 1 de mayo, por un periodo de tres meses, quienes devenguen más de 10 millones de pesos de salario, tendrán que descontar un porcentaje para aportar al Fondo de Mitigación de Emergencias que apoyará a los más vulnerables durante la emergencia por COVID-19.
El impuesto solidario es una medida del Gobierno Nacional para generar recursos de inversión social que serán destinados a los más vulnerables y trabajadores informales durante la emergencia sanitaria por el coronavirus en el país.
Desde el 1 de mayo y hasta el 31 de julio, los funcionarios públicos que reciban más de 10 millones de pesos y los pensionados con mesadas del mismo monto, tendrán que entregar un porcentaje de sus salario
El aporte para quienes ganen entre 10 y 12,5 millones será del 15 % de su prima mensual.
Para quienes devenguen entre 12,5 y 15 millones será del 16 %.
Para funcionarios que reciban entre 15 y 20 millones será del 17 %
Y los que tengan un salario superior a los 20 millones aportarán el 20 %.
Según el Gobierno Nacional cerca de 15.000 jubilados y el dos por ciento de los funcionarios del país, es decir 21.201 trabajadores entrarán en el impuesto solidario establecido en el decreto 568 de 2020.