Lima, 28 ene (EFE).- El primer ministro de Perú, Juan Jiménez, afirmó hoy que el expresidente Alberto Fujimori no puede escoger a los peritos médicos encargados de evaluar su salud como parte de la evaluación de un pedido de indulto humanitario.
"Las leyes se cumplen", enfatizó hoy Jiménez al ser consultado por los periodistas sobre la decisión de Fujimori de impedir, por segunda vez, la visita de una junta médica.
El primer ministro enfatizó, al respecto, que "en este caso existe una normativa que establece cómo funciona el procedimiento de un proceso de indulto humanitario".
"Ningún interno puede escoger las circunstancias, ni los peritos (...) la ley es igual para todos y todos debemos respetar los procedimientos", señaló.
El pasado 25 de enero, Fujimori se negó a recibir a la junta médica enviada por la comisión que evalúa la petición de indulto humanitario presentado por su familia en octubre pasado, debido a la exclusión de la misma de los doctores que le tratan habitualmente, según informó su abogado, César Nakasaki.
Jiménez ratificó hoy, sin embargo, "que las normas en Perú se deben cumplir: si uno se somete a un procedimiento tiene que cumplir las normas".
Negó, además, que las opiniones de los integrantes del Ejecutivo sobre este caso impliquen "algún tipo de procedimiento de intervención política" y recordó que la evaluación está a cargo de una comisión especial.
"Quiero eliminar cualquier suspicacia, se están presentando algunos escenarios que nadie había previsto, como que el propio interno no quiera ser evaluado", remarcó.
El viceministro de Justicia, Daniel Figallo, aseguró el domingo que la Comisión de Gracias Presidenciales resolverá la próxima semana si continúa con el proceso o archiva el trámite de indulto humanitario.
Según sus familiares, Fujimori es un paciente de cáncer "de alto riesgo" y el encierro que sufre agrava su estado de salud, que comprende un cuadro de depresión y problemas de presión arterial, entre otras dolencias.
Los médicos tratantes de Fujimori han manifestado que es un paciente que tuvo un cáncer en la lengua, pero que este actualmente se encuentra controlado.
Los críticos de Fujimori han señalado que su liberación representaría la impunidad a la violación de derechos humanos, y además indicaron que tiene una cárcel dorada en comparación a otros reos del país.
Fujimori fue condenado a 25 años de prisión por la autoría mediata de 25 asesinatos durante su Gobierno (1990-2000), y además ha sido sentenciado a penas menores por delitos de corrupción.
El presidente Ollanta Humala es quien tendrá la última decisión sobre el eventual indulto de Fujimori, y la tomará en un plazo indeterminado tras recibir una evaluación de la comisión que lleva el caso.