En un rinconcito del Pueblito Paisa, un fotógrafo profesional y las artes plásticas, ofrece a los visitantes tomarse una fotografía a la antigua, es decir, un poncherazo para que se aparte del mundo digital por un instante y disfrute el placer de una foto en blanco y negro y pueda aprender el proceso de revelado en vivo y en directo. Nuestra Cámara Ambulante lo visitó y aquí nos cuenta la historia.
A mediados del siglo XX, el poncherazo era la última tecnología para tomarse una foto en blanco y negro individual o familiar y a precio de hoy hubiera costado más de un millón de pesos. Aunque los formatos han cambiado, en este rinconcito del Pueblito Paisa, actualmente es posible un poncherazo o una foto agüita.
Para disfrutar de un buen poncherazo, hay que posar estático frente a la cámara de madera, esperar que el fotógrafo ingrese su cabeza a una funda, en solo 5 segundos disparar y quien modelaba podrá ver como revelaba el negativo y ver salir su fotografía nadando en la pochera de peltre, igual que lo vivieron los abuelos y antepasados.
El Pueblito Paisa está cumpliendo 40 años
No deje morir esta antigua costumbre, anímese a tomarse un poncherazo, aprenda sobre el proceso de revelado y guardar una foto para el recuerdo. Si llega y lo maravilla el poncherazo, pregunté por la fotografía estenopeica y se enamorará de una forma casera, didáctica y gratuita de tomar nuevas fotos.
No se quede en su hogar, salga a visitar el Pueblito Paisa que está cumpliendo 40 años, tómese el poncherazo o haga su cámara estenopeica en familia y exponga su fotografía en blanco y negro en la sala de la casa.