Las intensas lluvias provocaron una grave emergencia en el municipio de San Juan de Urabá, afectando a las comunidades de los corregimientos de La Balsilla, Damaquiel y Uveros. Las inundaciones dejaron a decenas de familias damnificadas.
Muchas de las familias lo perdieron todo, tras el desbordamiento de quebradas, caños y el colapso de sistemas de drenaje en zonas vulnerables del municipio.
En La Balsilla, las aguas se salieron de su cauce debido a la acumulación de residuos sólidos en los canales naturales y quebradas, que fueron arrastrados por las corrientes desde el inicio de la temporada invernal.
Damaquiel también sufrió afectaciones significativas. Las vías de acceso quedaron intransitables y el tramo Las Cruces–Damaquiel se vio seriamente deteriorado por el avance del agua. La erosión y la sedimentación del río han puesto en riesgo, no solo la infraestructura, sino también la seguridad de quienes habitan en esta zona rural.
En Uveros, la situación no fue menos crítica. Aunque el corregimiento había recibido intervenciones recientes en su sistema de alcantarillado, las lluvias superaron la capacidad de respuesta de la infraestructura existente.
Las familias afectadas esperan ayudas urgentes en alimentación, cobijas y kits de aseo personal.
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