En una reciente visita a La Escombrera, la JEP y la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, sostuvieron una encuentro con las familias víctimas de la operación Orión, quienes solicitaron la Jurisdicción Especial que se amplíe el perímetro de búsqueda.
Durante dos décadas, los familiares de las cerca de 500 personas consideradas como desaparecidas durante la operación Orión, continúan su lucha por encontrar la verdad que, en los días recientes, ha empezado a dar frutos.
Luego que se anunciará medidas cautelares en 2022 para proteger 6.912 metros cuadrados de la escombrera, dos años después y tras cinco meses de trabajo, un equipo forense de la unidad de búsqueda de personas desaparecidas, ubicó recientemente los primeros restos de óseos.
Dice las familias que no va a descansar hasta que haya reconocimiento de todas las víctimas de desaparición forzada en la Comuna 13. Además, hicieron una exigencia a la JEP.
Actualmente, las labores en la escombrera, se centran en alcanzar la zona de interés forense, es decir, recuperar el suelo a como estaba 20 años atrás.
Cada señalización, en color amarillo y morado, significa que los científicos forenses pueden desarrollar una labor de búsqueda más detallada de restos humanos.
La Escombrera es para los analistas del conflicto uno de los símbolos del terror que dejó el paramilitarismo en Medellín, y episodios dolorosos como la operación Orión y mariscal. Con estas labores se busca desenterrar la verdad que ha estado oculta durante más de dos décadas.
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