Fabián fue uno de los estudiantes beneficiario de la “Donatón Tecnológica” liderada desde la secretaría de educación. Él aceptó con responsabilidad y resignación la suspensión de sus clases, asumiendo los retos y dificultades que lo alejaron de las actividades del grado décimo, que cursa en la institución educativa Blanquizal.
Doña Rosa Marín, su madre, aún teme las consecuencias de la pandemia y espera el éxito del plan piloto iniciado en la institución para que el menor de sus 4 hijos viva con ilusión y cercano a la normalidad el final de su bachillerato, durante el 2021.
Fabián sueña con terminar su colegio y acceder a un técnico en negocios internacionales que le permita profesionalizarse mientras que trabaja y superar no sólo esta crísis del covid 19, sino las dificultades con las que busca convertirse en un orgulloso profesional para ayudar a su familia y servir a la ciudad.