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Tras el inicio de la construcción de la Ciudadela Universitaria Occidente en el sector de San Javier, donde antes quedaba la cárcel El Buen Pastor, una cámara de Noticias Telemedellín recorrió los que fueron los antiguos pasillos con una exinterna que con recuerdos de dolor, aplaudió la transformación que sufrirá el lugar.
Entre 2004 y 2009, Maryori vivió en los patios 1 y 4 de la desaparecida cárcel El Buen Pastor. Fueron los peores 5 años de su vida pagando en prisión una condena por el delito de extorsión agravada. Ella recuerda cómo fueron esas largas horas de soledad, dolor y sufrimiento.
Dice que durante 60 meses tuvo que aguantar frías noches y días de tristeza, y que aunque nunca pensó que las grises paredes se convertirían en una ciudadela universitaria, logró hacer parte de quienes encontraron en la educación otra opción de vida en la cárcel al poder enseñar a sus compañeras de reclusión a leer y escribir.
Sueña con más ciudadelas y menos cárceles
Esta madre y abuela, hoy completamente resocializada, añade que ojalá en Colombia existieran más escuelas y ciudadelas universitarias como la que se construye actualmente y menos cárceles.
Sueña con que sus hijos y nietos puedan estudiar en la nueva ciudadela que con más de 55 mil metros cuadrados ofrecerá oferta académica para 8 mil jóvenes de Medellín y que los mitos de cadenas, dolor, prisión y fantasmas, desaparezcan para darle paso a la educación superior.
