Desde hace casi 8 años, la zozobra y el miedo tiene en vilo a varias familias del sector El Pesebre, que a causa de la fuerza del agua de la quebrada La Iguaná, tuvieron que acatar orden de evacuación de sus viviendas.
Ahora, la intranquilidad aumenta, pues hace casi dos meses recibieron una orden de evacuación completa y no saben qué hacer.
Rosalba Piedrahita y varios vecinos de la quebrada La Iguaná, que tienen sus viviendas ubicadas en el barrio El Pesebre, llevan años luchando para no ser desalojados de sus casas.
Pero la recomendación de las autoridades de gestión del riesgo, es que varias familias deben salir de la zona por el riesgo de colapso que representa la fuerza de la quebrada. Incluso, en el hecho más reciente, hace cerca de 1 año, cuatro casas se vinieron al piso por las fuertes lluvias.
¿Por qué los están evacuando?
"Por el riesgo de la Iguana, quebrada la Iguana que se junta con la corcovada y por el desvío del cauce de la quebrada a partir del 2015 que fue construida la vía Aburrá Río Cauca", dijo Rosalba Piedrahita - Presidente Junta de Acción Comunal Barrio El Pesebre.
Ahora, una orden de la inspección de policía les comunica que las familias que quedan, deben retirarse en un periodo no menor a 6 meses.
"Según el documento, dice que tienen 6 meses para evacuar, demoler sus casa y desmontar los servicios y ya van 2 meses prácticamente. La comunidad dice para dónde nos vamos, el municipio deberá dar las garantías a la administración que vengan los entes de control y de derechos humanos y nos sentamos con ellos", explicó doña Rosalba Piedrahita.
"El fallo manifiesta que el municipio de Medellín vulnera los derechos colectivos de seguridad y salud pública, así mismo la seguridad y prevención de desastres, el segundo dice, que debe hacer la evacuación o que debe evacuar. Lo drástico aquí es que son 111 viviendas que equivale a 330 personas", advirtió Miguel Angel Barrientos - Habitantes del barrio El Pesebre.
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Según el Dagrd, la entidad emitió la recomendación de evacuación por el riesgo que representa para las 111 familias caracterizadas. Pero la orden final es competencia de las inspecciones.
Esa orden fue la que recibieron Rosalba y sus vecinos, ellos esperan que la administración distrital instale una mesa de diálogo y concertación con ellos para poder abandonar sus viviendas.
