Bruselas, 11 ene (EFE).- El eurodiputado español Willy Meyer, de Izquierda Unida (IU), denunció hoy ante la Unión Europea (UE) la "criminalización" de activistas campesinos en Honduras y la "persecución" del partido izquierdista colombiano Marcha Patriótica.
Meyer informó en un comunicado de que ha remitido dos preguntas parlamentarias a la jefa de la diplomacia de la UE, Catherine Ashton, en las que hizo patentes esas denuncias y le solicitó que frene el procedimiento de entrada en vigor del tratado de libre comercio con Colombia y Perú, y el acuerdo de asociación con Centroamérica, en el que está incluido Honduras.
El pleno del Parlamento Europeo dio su visto bueno en diciembre a ambos acuerdos, por lo que su aplicación está prevista para los próximos meses.
En el caso de Honduras, el eurodiputado dice que, según un estudio reciente de la organización Plataforma Agraria, entre 2010 y 2012 más de 3.000 activistas campesinos fueron detenidos y procesados "con una sola condena en firme, lo que demuestra que estamos ante una clara estrategia de criminalización de la necesaria lucha campesina por el acceso a la tierra".
Meyer responsabilizó de ello al Gobierno del presidente Porfirio Lobo, al que considera "ilegítimo" por haber llegado al poder tras el golpe de Estado en Honduras de junio de 2009 que derrocó al anterior mandatario, Manuel Zelaya. Lobo ganó unas elecciones convocadas a finales de ese año y asumió en enero de 2010.
"Casi un centenar de líderes campesinos ha sido asesinado impunemente por su compromiso y lucha por el acceso a la tierra y su participación en protestas contra el Gobierno golpista de los grandes terratenientes", subrayó el eurodiputado español.
Además, Meyer mostró la preocupación de su grupo parlamentario, Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica, sobre lo que calificó de "persecución política y sistemática obstaculización a la labor política de Marcha Patriótica", un movimiento de izquierdas creado el pasado año en Colombia.
"Estamos ante una insoportable campaña de hostigamiento y criminalización. Desde su nacimiento en abril pasado, han sido ya asesinados varios de sus miembros y, otros, detenidos bajo acusaciones falsas y con paramilitares supuestamente desmovilizados como testigos", señaló Meyer.
Asimismo, aseguró que la sociedad civil colombiana ha denunciado que el Gobierno de ese país lleva a cabo "un proceso de persecución de los movimientos políticos y sociales críticos, lo que pone en duda la supuesta voluntad de respetar y garantizar los derechos humanos".
Por todo ello, el eurodiputado reclamó a Ashton que no siga adelante la aplicación de los tratados alcanzados con Colombia y Perú, y con Centroamérica "hasta que la situación y el cumplimiento de los derechos humanos mejoren, y ambos Gobiernos trabajen firme y eficazmente para garantizar y respetar las libertades políticas y sociales más básicas".