Si bien el transporte público está exento de las medidas de aislamiento decretadas por el Gobierno Nacional, representantes del gremio en el Valle de Aburrá piden al Gobierno Nacional más garantías para poder poder prestar sus servicios pues de lo contrario deberán parar.
De los 3.450 buses que normalmente circulan por Medellín y el Valle de Aburrá, hoy un 10 % de ellos se encuentra operando, lo que quiere decir que solo 350 buses están prestando servicio. Y es que el flujo de pasajeros ha disminuido como consecuencia de la cuarentena, por ello las cifras son desalentadoras para el gremio.
Algo similar ocurre con el gremio de taxistas. Por ejemplo, según el gerente de Tax Individual, desde que comenzó a regir la cuarentena alrededor de 4 mil vehículos fueron guardados, de los casi 6 mil con los que cuenta la empresa, lo que ha afectado además la economía de los trabajadores de este oficio pues muchos también están en casa.
Por eso y aunque son conscientes de la situación por la que atraviesa el país, en nombre del gremio piden al Gobierno que los escuche y les brinde mayores garantías.
Con el fin de alivianar cargas, desde el Gobierno departamental y local se ha promovido la entrega de mercados y otro tipo de ayudas a los transportadores afectados por la cuarentena.
