Bogotá, (EFE). El presidente, Juan Manuel Santos, ordenó a las Fuerzas Militares y a la Policía "arreciar" las operaciones contra las guerrillas y las bandas criminales a raíz de un ataque conjunto en el norte del país que dejó siete policías muertos y cinco más heridos.
"Este crimen no quedará impune", señaló el jefe de Estado en una declaración que dio en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, en la que condenó el asesinato de los policías.
Santos dijo que, según información de la Policía, el ataque contra un escuadrón de carabineros en Tierradentro, en el departamento caribeño de Córdoba, fue obra de una alianza entre el frente 58 de las FARC y hombres del Clan Úsuga (antiguos Urabeños), banda criminal de origen paramilitar.
"Le di instrucciones al general Palomino que se trasladara al sitio de los hechos, y le he dado instrucciones a él y a todos los comandantes de nuestras Fuerzas Militares para que arrecien la ofensiva que debemos mantener en contra de estas organizaciones", manifestó Santos.
El general Palomino dijo que siete miembros de la patrulla de carabineros sobrevivieron al ataque en el que murieron los otros siete agentes y en su cuenta de Twitter prometió: "perseguiremos a sus asesinos donde estén".
Santos calificó el ataque de "cobarde" y recalcó que "merece el repudio de todos los colombianos".
"Nuestros corazones están con las familias de estos policías, de este héroes de la patria", agregó el presidente.
Pese a los diálogos de paz que se desarrollan entre el Gobierno y las Farc desde noviembre de 2012 en La Habana, los enfrentamientos entre ambos continúan en el país, pues las partes acordaron que no se declarará el cese al fuego hasta alcanzar un acuerdo no paz.