Ciudad del Vaticano, 10 feb (EFE).- El papa Benedicto XVI pidió hoy que los cristianos hallen el valor, la confianza y el impulso para proclamar y dar testimonio del Evangelio y que no se desalienten ante los fracasos y las dificultades.
El papa hizo este llamamiento ante los miles de fieles que acudieron a la plaza de San Pedro para el tradicional rezo del Ángelus dominical.
El pontífice reflexionó además sobre la vocación al sacerdocio y a la vida consagrada y señaló que esta es "obra de Dios".
"El hombre no es el autor de su vocación, sino la respuesta a la propuesta divina. La debilidad humana no debe dar miedo si Dios llama (...). Hay que tener confianza en la potencia de su misericordia, que transforma y renueva", manifestó.
El papa señaló, además, que este domingo varios pueblos del Extremo Oriente celebran el Año Nuevo lunar y subrayó que "paz, armonía y agradecimiento al Cielo son los valores universales que se celebran en esta ocasión y son deseados por todos para construir la propia familia, la sociedad y la nación".
"Deseo que para estos pueblos se pueda cumplir la aspiración de una vida feliz y próspera", agregó.
Benedicto XVI quiso recordar también que mañana se celebra la Jornada Mundial del Enfermo y destacó que está cerca de todos ellos a través de la oración.
En los saludos a los peregrinos de lengua italiana tras el rezo del Ángelus, el papa expresó su aprecio por la iniciativa "Banco Farmacéutico" que durante la jornada del sábado llevó a cabo una recogida de medicamentos en España, Italia y Portugal.