La Habana, 26 may (EFE).- El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron hoy que han llegado a un acuerdo sobre el tema de la tierra, el primer punto de la agenda pactada para los diálogos de paz que se desarrollan en Cuba.
El acuerdo se dio a conocer en un acto formal en el Palacio de Convenciones de La Habana en el que estuvieron presentes los negociadores del Gobierno y de la guerrilla, y representantes de los países garantes del proceso (Cuba y Noruega), y los acompañantes (Venezuela y Chile).
Las partes han llegado a acuerdos sobre aspectos como el acceso y uso de la tierra, las tierras improductivas, la formalización de la propiedad, la frontera agrícola, y la protección de Zona de Reserva, según un comunicado conjunto de la mesa de negociación, leído por los representantes de los países garantes en este proceso de paz, Carlos Fernández de Cossío, de Cuba, y Dag Mylander, de Noruega.
El Gobierno y las FARC también han logrado consensuar aspectos como programas de desarrollo con enfoque territorial, infraestructura y adecuación de tierras y el impulso al desarrollo social en el campo en áreas como la salud, educación, vivienda y la erradicación de la pobreza.
El acuerdo, denominado "Hacia un nuevo campo colombiano: reforma rural integral", supondrá "el inicio de transformaciones radicales de la realidad rural y agraria de Colombia con equidad y democracia", según reza el comunicado conjunto.
Según los negociadores de paz, este acuerdo "está centrado en la gente, el pequeño productor, el acceso y distribución de tierras y la lucha contra la pobreza, el estímulo a la producción agropecuaria y la reactivación de la economía del campo".
Uno de los objetivos también es "revertir los efectos del conflicto y que se restituyan las víctimas del despojo y del desplazamiento forzado".
Los negociadores recuerdan que uno de los principios del proceso de paz es que "nada está acordado hasta que todo esté acordado", es decir, que la aplicación de los acuerdos que se vayan construyendo está condicionada a que se logre un tratado definitivo de paz.
De esta forma, el Gobierno y las FARC cierran el noveno ciclo del proceso de conversaciones que se retomarán el próximo 11 de junio con una nueva ronda en la cual tratarán el punto de la participación de esa guerrilla en la vida política de Colombia una vez que se alcance la paz.