Los muros de la vivienda donde residía una familia que hoy ya no está, fue de lo poco que que quedó en pie en la vereda El Potrerito, de Bello, luego del paso intempestivo de la quebrada La Ortega que la noche de este viernes 25 de junio, luego de superar sus máximos niveles, se desbordó, arrasando con todo a su paso.
El panorama era desolador, la quebrada bajó cargada de innumerables piedras y troncos que terminaron sepultando las motocicletas y los vehículos que estacionados, y la vivienda donde vivían tres personas, entre ellas dos pequeños de 5 y 16 años, que no alcanzaron a ver la luz de nuevo para jugar con sus amiguitos.
Luego de la creciente, se vino la evacuación. En instantes, todos los habitantes aledaños al cauce de la quebrada comenzaron a abandonar sus viviendas, huyendo del peligro y del horror que acaban de vivir, evacuación acompañada por la Alcaldía de Bello que, a esta hora, avanza en las labores de censo.
Dos personas más que estaban en el interior de las viviendas que colapsaron por la fuerza del agua, resultaron heridas y ahora reciben atención en un centro asistencial. Por fortuna, hasta ahora, no se reportan personas desaparecidas.