Con el antecedente del clásico anterior los hinchas rojos estaban prevenidos. Los verdes, más tranquilos que sus vecinos y esta vez como visitantes, aprovecharon la invitación para nuevamente estar juntos en el Atanasio.
Jugar en casa fue solo un decir para los rojos, que salvo tener la mayoría de hinchas de su lado, volvieron a caer estrepitosamente contra el rival de patio, acumulando 5 derrotas consecutivas en una situación que para el técnico encargado parece no tener explicación.
En la otra orilla, las aguas están más calmadas, inlcuso la victoria parcial 3-0 en el primer tiempo, alcanzó incluso para regular las cargas pensando en lo que viene.
Los seguidores de Independiente Medellín reposan sus esperanzas en el trabajo del nuevo cuerpo técnico.
Ambos equipos definirán esta semana el paso a la semifinal de la Copa Águila, Nacional de visita ante Tolima y Medellín de local contra Once Caldas.