Los sectores de agroindustria y alimentos, manufacturas y prendas de vestir colombianos cuentan con una buena oportunidad de ingreso a los 28 países e islas del Caribe, una región que importa el 98% de sus bienes de consumo y busca una oferta con valor agregado.
Ricardo Vallejo, vicepresidente de Exportaciones de Proexport, explicó que se detectó un crecimiento de las exportaciones hacia el Caribe, lo que motivó a buscar capacitar a los empresarios, pues “existe un desconocimiento por parte de los empresarios, sobre cómo llegar a las islas más remotas”, señaló.
Con este propósito se realizó el seminario Logística y Oportunidades en el Caribe, dirigido a empresarios que proyectaran exportar a estos países y acompañarlos a contactarse con operadores logísticos, como las navieras, así como facilitar alianzas entre empresarios, de forma tal que puedan compartir los espacios de carga en contenedores y abaratar los costos de fletes.
Al respecto, Carlos Fernando González, director de la oficina para el Caribe de Proexport, manifestó que es necesaria la sinergia logística y puso un ejemplo: “existe una empresa fabricante de baldosas para pisos, que envía cargamentos muy pesados, que sólo llena una parte del contenedor. Ellos aprovechan una alianza con otra empresa que fabrica materiales aislantes livianos para llenar el espacio vacío y así abaratan costos”.
Fortalecer puertos, mejorar vías
La meta es conectar a nuestro país como productor, con los destinos de exportación como consumidores, destacó Carlos José González, administrador marítimo de la Escuela Naval Almirante Padilla y experto en logística. Explicó que “el mercado del Caribe es creciente, cada vez recibe más productos que estamos en capacidad de exportar, como materiales de construcción, manufacturas y perecederos”.
Sin embargo, el principal obstáculo para enviar mercancías es la falta de líneas directas, que obliga a hacer transferencias de un barco a otro, lo que encarece los fletes.
Expresó que esa es la importancia de la inversión en infraestructura portuaria y vial, “pues el puerto solo no sirve, hay que conectarlo vía terrestre, con los centros de producción en las ciudades”, concluyó.
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