Desde este jueves 16 de junio todos los ciudadanos que lo deseen pueden entregar sus armas. Diecinueve parroquias abrieron sus puertas a esa actitud, porque es que más que entregar el arma, el desarme es una actitud.
La Secretaría de Gobierno de Medellín trabaja su compromiso con la seguridad de la ciudad sobre tres ejes que sostienen ese trabajo: autoridad, oportunidades, movilización. Ésta, la Semana del Desarme, hace parte del tercero, y en ello el compromiso es de todos, porque el no porte físico de un arma no significa que estemos desarmados.
Sobre esos tres ejes, el gobierno de la ciudad construye coherencia. La autoridad trabaja, dispone, decide; las oportunidades abren sus puertas, y ello no consiste sólo en devolver algo a cambio del arma. El trabajo del desarme está en programas como Buen Comienzo, Fuerza Joven, Viviendas con corazón, Jóvenes con Futuro, Medellín Solidaria, el Plan de Desarrollo todo.
El desarme no está sólo en poner la pistola o el cuchillo sobre una mesa. Más que un acto, el desarme es actitud. Esto funciona si hay gobierno, más comunidad, más acción…
Porque aunque hablemos de “violencia armada”, no podemos pensar que las violencias desarmadas existen.
Luis Alirio Calle M.
@luisaliriocalle