Estados Unidos anunció la descertificación de Colombia en materia de lucha contra las drogas al señalar que, bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro, el país llegó a niveles históricos en cultivo de coca y producción de cocaína, alcanzando una extensión de 253 mil hectáreas a cierre de 2023, incumpliendo, incluso, las metas reducidas de erradicación y debilitando los avances logrados durante años de cooperación binacional.
En el documento, el Gobierno de Estados Unidos hace referencia a los altos niveles de producción y a los procesos de los grupos armados que no han tenido éxito y que, según el Gobierno norteamericano, han aportado a la crisis.
En Colombia, el cultivo de coca y la producción de cocaína han alcanzado niveles récord bajo la presidencia de Gustavo Petro, y sus intentos fallidos de buscar acuerdos con grupos narco-terroristas solo han exacerbado la crisis. Bajo el liderazgo del presidente Petro, el cultivo de coca y la producción de cocaína han alcanzado cifras históricas, mientras que el Gobierno de Colombia no logró cumplir ni siquiera sus propias metas de erradicación de coca, que ya habían sido significativamente reducidas, socavando años de cooperación mutuamente beneficiosa entre nuestros dos países contra los narco-terroristas. Por esta razón, he designado a Colombia como un país que ha fracasado de manera demostrable en cumplir con sus obligaciones de control de drogas.
Otra de las problemáticas que advierten las autoridades es que el narcotráfico sigue alimentando una emergencia de salud pública en Estados Unidos.
El tráfico de personas por parte de organizaciones criminales transnacionales y otras drogas ilícitas en los Estados Unidos ha creado una emergencia de salud pública, que incluye una crisis de sobredosis que sigue siendo la principal causa de muerte para los estadounidenses de 18 a 45 años, más del 40% de los estadounidenses que se sabe que han muerto a causa de una sobredosis.
No obstante, la Casa Blanca destacó la valentía, el compromiso y el papel activo de los mandatarios locales de Medellín y Cali en la defensa de los intereses del país, quienes, junto con altos mandos de seguridad, como los generales Cubides y Triana, sostuvieron reuniones clave la semana pasada con funcionarios del Gobierno estadounidense, buscando fortalecer la cooperación bilateral en materia de seguridad y lucha contra el narcotráfico.
Las instituciones de seguridad de Colombia y las autoridades municipales continúan mostrando habilidad y valentía al enfrentar grupos terroristas y criminales, y Estados Unidos valora el servicio y sacrificio de sus dedicados servidores públicos en todos los niveles de gobierno. El fracaso de Colombia en cumplir con sus obligaciones de control de drogas durante el último año recae únicamente en su liderazgo político.
Bolivia, China, Afganistán, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador y ahora Colombia son algunos de los países incluidos en la lista de naciones descertificadas.
En el caso colombiano, la decisión ha generado controversia, dado que, según Estados Unidos, la responsabilidad recae directamente en el presidente Gustavo Petro.