Reinaldo Rueda basa la planificación del juego de ida en Quito en concientizar a sus jugadores de las cualidades del rival y de la altura de Quito para no llevarse una sorpresa.
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Pero en el trabajo mental, Rueda ha sido muy inteligente para motivar a sus dirigidos sabiendo la importancia histórica del reto que tienen por delante.
El vallecaucano exseleccionador nacional de Ecuador, sabe muy bien lo que representa esta final para el cono norte de Suramérica. Rueda, un hombre que ya sabe que es clasificar a dos mundiales de la FIFA, ahora aspira a conseguir su mayor triunfo en clubes, la Copa Libertadores.
