Las Empresas Públicas de Medellín y Afinia arrastran una deuda del Estado por los pasivos del no pago de los subsidios de energía de los estratos 1, 2 y 3.
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El monto adeudado a EPM se divide principalmente en dos rubros: 2,27 billones de pesos corresponden a la opción tarifaria, una medida implementada para aliviar el costo de las facturas a los usuarios durante la pandemia y 1,25 billones se deben a subsidios otorgados a los estratos más bajos.
Por su parte el Gobierno nacional le adeuda en subsidios a la empresa Afinia 664 mil millones de pesos a corte de enero de 2025, un incremento respecto a los 591 mil millones pendientes en diciembre de 2024. Además, el saldo total por opción tarifaria asciende a 1,395 billones de pesos, de los cuales 970 mil millones corresponden a los estratos 1, 2 y 3.
La empresa, que suministra energía a más de un millón de usuarios en la costa caribe, ha advertido que la falta de pago podría comprometer la continuidad del servicio y su capacidad de inversión en mejoras de infraestructura.
Estas deudas han generado preocupación en el sector eléctrico, pues afectan la estabilidad financiera de las empresas y su capacidad de operación. EPM, una de las principales generadoras y distribuidoras de energía del país, podría verse obligada a tomar medidas drásticas si no se garantiza el pago de los recursos.
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Las empresas afectadas y expertos del sector energético han solicitado al Gobierno nacional una solución urgente que permita saldar estas obligaciones y evitar un eventual deterioro en la prestación del servicio.
