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Pasado ocho meses, visitamos al gato Romeo que se convirtió en el primer felino en tener un marcapasos, su condición de salud ha mejorado notablemente desde la operación y ante los resultados el proceso se podría replicar.
El 24 de enero de 2020 se marcó un hito en el país por cuenta del gato Romeo, el primer felino al que se le implantó un marcapasos por una cardiomiopatía hipertrófica felina diagnosticada en 2019 y que le producía desmayos frecuentes.
Hoy luego de ocho meses de intervención, el gato Romeo goza de muy buena salud, su condición ha mejorado satisfactoriamente.
Y ese momento doloroso de ver a su gato de 10 años a punto de morir, se transformó en felicidad y esperanza, cuando 12 profesionales entre neurocirujanos, cardiólogos, electrofisiólogos enfrentaron este reto.
Ahora Romeo juega con Chester sin cansarse y tiene una vida normal. Eso sí, se convirtió en la guía para continuar con estos procesos científicos y es así, como ya se adelantan gestiones para practicar una segunda cirugía de implante de marcapasos a un gato de Bogotá.
