Una pavorosa imagen es viral por estos días que da cuenta de una tragedia ambiental. En una remota playa de la isla de Tasmania, Australia, alrededor de 157 falsas orcas quedaron varadas, a 90 de ellas se les aplicará la eutanasia.
Así lo determinaron las autoridades tras fracasar en los esfuerzos de disipar a los individuos sobrevivientes que permanecían expuestos a los rayos del sol y a los fuertes vientos.
Shelley Graham, quien se encuentra al frente de la contingencia, aseguró que “tras la evaluación de un veterinario experto, hemos tomado la decisión de aplicar la eutanasia a los animales”.
“La situación es crítica. Los animales están sufriendo y no hemos encontrado alternativas viables para salvarlos”, agregó.
Los machos pueden llegar a medir hasta 6 metros y las hembras son más pequeñas. Su peso se estima entre 1 a 2 toneladas.
De acuerdo con Brendon Clark, responsable del Servicio de Parques y Vida Silvestre de Tasmania, este es el primer varamiento masivo de falsas orcas en la zona en unos 50 años. El último que tuvo lugar ocurrió en 1974 con un grupo de 160 ejemplares.
Clark manifestó que las causas de estos eventos continúan siendo inciertas, pero podría deberse a desorientación por ruidos fuertes, lesiones, enfermedades, condiciones climáticas extremas o huida de depredadores.
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