El pasado 02 de noviembre Corea del Norte encendió alarmas en Corea del Sur, Japón y Estados Unidos; tras realizar el lanzamiento de tres misiles balísticos con dirección al océano Pacífico. Uno de ellos, al parecer, tenía la intención de sobrevolar el archipiélago de Japón.
Tres días después, el 05 de noviembre, el país gobernado por el dictador Kim Jong-un, lanza de nuevo cuatro misiles de corto alcance, esta vez con dirección al mar amarillo, cruzando la línea que demarca la frontera de las Coreas. Un mar que se conecta con el océano Pacífico y que esta al suroccidente de Corea del Sur.
La tensión entre estos países es histórica, sin embargo viene incrementándose desde el mes de octubre. Ante estos ataques, Corea del Sur también respondió y lanzó tres misiles de precisión en mar abierto, pero sobrepasando la línea que divide las dos Coreas. Estados Unidos y Japón están alertas, y los tres países estarían reuniéndose buscando estar atentos a otros posibles ataques de Corea del Norte.
Una de las decisiones que tomó Estados Unidos como medida de alerta y como muestra de poder, fue enviar aviones bombarderos B-1B que harán maniobras conjuntas con aviones de Corea del Sur sobrevolando la península de Corea.
Corea del Norte lanza misiles nuevamente hacia Corea del Sur
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