La toma ilegal de energía desde una red sin pasar por el medidor, así como la manipulación de los contadores, son las prácticas más frecuentes con las que personas naturales y jurídicas siguen defraudando a Epm, que cada año deja de recibir unos 180 mil millones de pesos. Esa situación le pasa una alta factura no solo a la empresa, también a la ciudad.
Según Epm cada año la empresa pierde 800 gigavatios hora al año, de ellos el 50% corresponden a pérdidas no técnicas, es decir, por cuenta del robo.
Hace unos días la Fiscalía anunció la imputación de cargos contra los representantes legales de 10 empresas del sector industrial y comercial, entre ellas fábricas, hoteles y casinos, establecimientos que habrían defraudado con conexiones ilegales desde los 100 hasta los mil millones de pesos a Epm.