Luego de la primera emergencia por el inicio de la temporada de lluvias en Bello, las autoridades del municipio recordaron que esta población se encuentra en alerta naranja por el riesgo de deslizamientos y desbordamiento de los cauces. Ante las probabilidades el municipio se prepara para atender y prevenir más estragos.
Quebradas como La García que fue la que se desbordó recientemente, El Hato, Cañada Negra y La Loca son algunas de las que con cada temporada de lluvias se salen de su cauce, por eso las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía a limpiar estructuras para evitar que empeore la situación.
La Administración Municipal destina 300 millones de pesos para la limpieza de afluentes, 57 más para la compra de insumos para atender a la población, y 100 millones para ayudas humanitarias.
Recordemos que, con el desbordamiento de La García, 57 familias de 30 viviendas resultaron damnificadas.
