En total de 63 cajas, que contienen debidamente documentados 1.045 expedientes de reclamaciones de tierras despojadas en Antioquia por grupos paramilitares, le fueron entregados ayer al Ministerio de Agricultura por parte de la Comisión Regional de Restitución de Bienes (Crrb) de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (CNRR).
Con lo anterior se da cumplimiento a lo estipulado en la Ley 1448, Ley de Víctimas, que deroga las funciones de la Comisión para crear la nueva Unidad de Gestión de Tierras Despojadas, adscrita al Ministerio de Agricultura, desde donde se documentarán y tramitarán todos los casos de reclamación de tierras a partir del 1 de enero de 2012.
Con esta entrega formal, la Crrb da por terminados poco más de dos años de labores, en los que logró avanzar no solo en la documentación de casos de despojo de tierras en el departamento, sino que también aportó rutas metodológicas para la restitución, que de seguro serán de gran utilidad para la nueva institucionalidad que comenzará a regir desde el próximo año.
“De las 12 comisiones existentes en el país, la de Antioquia es la penúltima en entregar sus expedientes, pero es la que más casos y mejor documentados le entrega a la nueva Unidad”, manifestó Jaime Jaramillo Panesso, hasta ayer, coordinador de la CRRB.
Despojo en cifras
Gracias a esta labor de documentación, se ha podido establecer hasta el momento que cerca de 53 mil hectáreas son objeto de reclamaciones por poco más de 1.100 víctimas de despojo en el departamento.
En términos subregionales, Urabá, con 747 casos; seguido del Oriente antioqueño, con 123 casos y el Occidente, con 39, figuran como las subregiones del departamento donde más se logró evidenciar el flagelo del despojo de tierras.
En ese orden de ideas, Turbo, Urabá antioqueño, concentra el 34% del total de reclamaciones con 373 solicitudes. Le siguen en su orden Necoclí con 132 solicitudes; Mutatá con 112; Arboletes y San Carlos con 31 y Apartadó con 30.
Si bien la Crrb mostró un gran avance en la documentación de este flagelo, que además encierra un alto grado de complejidad por las históricas relaciones informales de los campesinos con la tierra, se estima que aún sigue existiendo un gran subregistro. Y esa es precisamente la tarea que deberá continuar la nueva Unidad de Gestión de Tierras Despojadas.
“La nueva Unidad continuará documentando estos casos, recibirá otros nuevos, determinará si los incluye en la base de datos que se va a crear, y luego los tramitará ante la justicia para que resuelva la restitución”, declaró Antonio Espinoza, delegado del Ministerio de Agricultura.
Según Espinoza, mientras se adecúa la sede permanente de la nueva Unidad en Medellín, los interesados podrán dirigirse al piso 10 de la Gobernación de Antioquia. Desde allí se espera continuar con el trabajo de documentación hecho por la Crrb que, a juicio de Jaramillo Panesso, logró grandes avances en lo que a Urabá y Oriente antioqueño se refiere.
Sin embargo, quedan temas pendientes. Uno de ellos es ahondar en la situación del Bajo Cauca. La otra guarda relación con 32 casos de despojos urbanos, de los cuales 16 se cometieron en Medellín. “La Ley no contempla restitución para bienes urbanos. Por ello, vamos a tramitar custodia ante la Procuraduría”, concluyó Panesso.
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