Molestos están los profesores y estudiantes del colegio Tomás Cadavid en el municipio de Bello, pues desde 2016 tuvieron que evacuar la institución por un riesgo de colapso y aunque los arreglos se suponían estarían listos para finales del 2017 a la fecha no los han entregado.
En 2016 se declaró urgencia manifiesta en la colegio Tomás Cadavid en Bello por fallas estructurales
Durante todo este tiempo los menores estudian en módulos portátiles que solo tenían vida útil para 12 meses.
Desde la Personería denuncian los sobrecostos de las obras, mientras que la Secretaría de Educación de ese municipio explica qué ha pasado.
Según las directivas de la institución cada mes se pagan 200 millones de arriendo por los módulos en los que estudian los 1.600 estudiantes.
