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Lo que surgió como una idea de un grupo de amigos, terminó convirtiéndose en una realidad y aunque al principio solo pensaban en regalar una operación fueron conociendo más casos de niños con diagnósticos como polidactilia, pies torcidos hernias umbilicales y otros en los cuales las EPS no había dado las autorizaciones para sus intervenciones, pese a tutelas y otros mecanismos legales realizados por las madres.
Conmovidos hicieron una convocatoria en redes sociales en donde recibieron más de 100 solicitudes, hicieron un primer filtro y pasaron 60 menores, pero la fortuna llegó solo para ocho inicialmente, niños de escasos recursos agobiados del trajín de las EPS y que dieron con unos ángeles llamados Simón Pedro y Mónica que pusieron sus manos protectores para cambiarles la vida.
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Uno a uno fueron entrando a sala de espera para luego ingresar a cirugía, emocionados contaban que la vida les iba a cambiar, incluso para Leidy Yuliana Serna una de las madres de un niño beneficiado, quien desde los 6 meses de vida tuvo un diagnóstico de hernia umbilical que, con el pasar de los años, fue afectando su calidad de vida.
Los cirujanos dispusieron de su tiempo, las personas de buen corazón de refrigerios y dinero y la Fundación Patronato de las ayudas diagnosticas ,examen y proceso de rehabilitación, ellos estuvieron acompañando en todo momento a los menores y sus familias en una labor por dignificar la vida y la salud de estos pequeños pacientes.
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Inicialmente fueron operados ocho niños, pero la idea es que el 2023 termine con más menores beneficiados, pero eso solo se logra con ciudadanos de buen corazón que se quieran sumar a esta causa mediante donaciones a la Fundación Patronato.
