[Comentario de LACalle] La autoridad ha alertado sobre el licor adulterado que está en la calles, y que prolifera en épocas de fiesta para infortunio de víctimas cada vez más numerosas, y más desinformadas, y más vulnerables.
La advertencia está oficialmente hecha: por una botella de alcohol etílico, es decir, apto para el consumo humano, hay otra de alcohol metílico, esto es, trago adulterado y piratiado y puesto a la venta sin consideración alguna de los estragos que causa, como severas intoxicaciones entre lo más leve.
Lo más grave: la ceguera y la muerte.
La prensa publicó esta semana historias atroces que hablan de lo que les ha pasado a muchos… y a muchos les puede pasar. Al comerciante inescrupuloso sólo le importa su ganancia.
Además de antiético, que no es castigado, es ilegal, que sí da castigo, pero en un país de bebedores, donde nadie ve mucho, hay que ponerse los anteojos y ayudar a la autoridad.
No es un fenómeno nuevo, mas no por ello de poca monta. Si no abrimos los ojos frente al licor adulterado, corremos el riesgo, a cuenta de tal adulterio, de no poder abrirlos para ninguna otra cosa.
A familia y educadores, autoridad y dueños de bares, a todos en casos como éste nos está prohibido sufrir de ceguera.
Luis Alirio Calle M.
@luisaliriocalle
