El centro de Medellín se ha caracterizado por ser un lugar de referencia para propios y turistas, es el corazón de la ciudad, un lugar cargado de recuerdos y memorias para quienes alguna vez compartieron allí.
Entre los años 20 y 50, el centro de Medellín vivió lo que podría considerarse como sus épocas doradas. Sus zonas arquitectónicas, el movimiento económico, los espacios para personas de todos los estratos como el corredor de Junín fueron característicos de esa Medellín de antaño, donde las personas se aglomeraban para compartir.
“De 1920 a 1930 fue una época brillante del centro por la construcción por ejemplo del Teatro Junín y eso ya va a tener una suerte de referente cultural y arquitectónico que va a ser importante. De los 30 a los 40, cuando es la segunda industrialización de Medellín y el Valle de Aburrá, el centro también va a ser muy atractivo por su poder económico porque además están los sitios de la banca, de la bolsa, de las oficinas, de las industrias”, indicó Reinaldo Spitaletta, profesor, periodista y escritor.
Este lugar es un referente patrimonial, un punto de encuentro e incluso de lectura de lo que fue una ciudad de intelectuales. En Medellín se guarda la memoria de los tiempos pasados, algunos mejores incluso que el presente.
“El centro tiene características de que atrae pero también repele, el centro es el termómetro que mide en qué circunstancias está una sociedad, según esté el centro, eso nos puede servir para hacer un examen del resto de lo que sería la periferia”, agregó Spitaletta.
Pese a los grandes cambios que ha sufrido, el corazón de la ciudad de la eterna primavera, aún quedan varios lugares por rescatar que se mantienen históricamente intactos y que guardan las vivencias y la memoria de la ciudad.
“En Medellín tenemos unas zonas maravillosas donde hay sedes teatrales, sedes de música donde hay todavía algunas universidades en el centro, eso me parece clave también para que el centro adquiera también otras dinámicas de lo que hubo antes, de la cultura y una dinamización de las clases sociales”, puntualizó el docente.
El centro es el lugar donde nació Medellín, desde el que dejó de ser una villa para convertirse en una gran urbe, a la que hoy siguen llegando ciudadanos de todo el mundo, pero el que, aún con el paso del tiempo, no dejará de ser ese rincón del cual aún se cuentan historias.
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