El megaoperativo se desarrolló en Manrique y Popular de Medellín, donde fueron capturados 23 integrantes de la peligrosa banda San Pablo.
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Esta banda no solo controlaba el tráfico de drogas, la extorsión y estaban detrás de secuestros, sino que incluso tenían un monopolio del acueducto. Uno de los judicializados es Andrés Seguro, presidente de la Junta de Acción Comunal de Carambolas, que cobraba las cuotas por el acceso al servicio público.
“En este procedimiento que duró 10 meses de investigación, pero que se retomaron procesos judiciales desde 2015 y en un trabajo articulado con la Fiscalía General de la Nación con el Gaula destacado para los casos de extorsión”, indicó el general William Castaño, comandante de la Policía Metropolitana.
En este golpe también fueron capturados ocho cabecillas y coordinadores de la zona, donde incluso tienen una disputa interna que ya dejó dos integrantes asesinados.
“Y nosotros al interior de la alcaldía de la mano de la Policía y la Fiscalía los habíamos declarado como un objetivo de alto valor fue así como entonces en días pasados mediante esas 30 diligencias de allanamiento se logró la captura de 23 integrantes”, señaló Manuel Villa Mejía, secretario de Seguridad de Medellín.
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Los 23 capturados fueron enviados a la cárcel.
