200 estudiantes de 75 instituciones educativas de Medellín hacen parte del programa Educación Complementaria estuvieron en un campamento durante cuatro días para afianzar sus conocimientos.
De los 200 estudiantes que participaron en el campamento, 50 son considerados con capacidades excepcionales. Una de ellas es María Paulina Aristizabal, estudiante del grado 10° de la Institución Educativa Santa Catalina de Siena, quien en un proyecto de investigación sobre el autismo desarrolló un aparato para mejorar la calidad de vida de los niños en esta condición.
Tras darse cuenta de que los niños que padecen autismo se alteran cada vez que en su entorno se produce un sonido muy fuerte, María Paulina creó el dispositivo que en su primera fase tiene un sensor que detecta los sonidos fuertes y la idea es que en la segunda parte del proyecto reproduzca música que tranquilice.
Juan Quintero Flórez es estudiante de la Institución Educativa Madre Laura y también estuvo en el campamento. Con tan solo 16 años ha viajado a Estados Unidos a participar en proyectos como Rocket Science. Juan hace parte de la ruta de bilingüismo y quiere estudiar ingeniería espacial.
Este año el presupuesto en educación para Medellín fue de $1,36 billones de pesos.