Miembros de las 8 estaciones de Bomberos de la ciudad estuvieron acompañados de sus familias y revolviendo natilla para conquistar los paladares de exigentes jurados del Natilla Máster.
Normalmente los bomberos tienen que apagar el fuego, pues esta vez les tocó lo contrario, encenderlo para preparar la mejor natilla.
Esta vez no fueron mangueras sino cucharas de palo las que con ahínco y pasión los bomberos de Medellín tuvieron en sus manos durante horas para lograr que su estación se llevará el premio a la mejor natilla.
Tulio Zuluaga y Juan Pablo Tetai fueron los encargados de juzgar la mejor natilla. Aunque algunos innovaron agregando quesito, amaretto y mantequilla, otros prefirieron la receta tradicional.
La actividad de esparcimiento e integración del Cuerpo de bomberos de Medellín dejó como ganador de la Natilla Máster al equipo de la estación Guayabal.