Lo que normalmente buscamos en un bolso o en una cartera es que tenga estilo, que salga con todas las pintas, que sea cómodo de llevar y que albergue el mayor número de objetos posibles en su interior.
Esto último pareció no importarle a la persona que se quedó con esta cartera, un bolso de mano apenas visible para el ojo humano.
Una cartera color verde amarillento fluorescente, con dimensiones de 0,65 por 0,22 por 0,7 milímetros, rompió los récords de subastas en línea.
Este bolso, catalogado como el más diminuto del mundo, fue vendido por más de 63 mil dólares, aproximadamente 226 millones de pesos colombianos.
Para la fabricación de este artículo se utilizó la polimerización de dos fotones, una tecnología que posibilita la impresión de piezas de plástico a microescala en 3D. Es tan pequeño como un grano de sal.
La venta la organizó Joopiter, una casa de subastas en línea cuyo fundador es el músico Pharrell Williams. Junto al bolso, el anónimo comprador se llevó un microscopio con una pantalla digital en la cual se puede ver la cartera.
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