La adrenalina se lleva en la sangre. Y eso lo demostró hoy la primera válida departamental de moto velocidad, donde padre e hijo corrieron por las calles del barrio obrero de Bello. Previo a la carrera algunos consejos de quien lo inculcó a montar en una motocicleta. Luis Eduardo es el padre Luis Felipe quien con tan solo 13 años pudo meterse a la final de la categoría 115.
El padre, o sea el más experimentado sufrió una caída y fue el más pequeño de la familia Arredondo quien sacó la cara y demostró que tiene un gran futuro como motociclista.
Como padre sufre y no se concentra lo mismo, pero quien más padece en cada curva es Kerly, la única mujer de la casa. Y aunque sabe lo riesgoso que es montarse en una moto, apoya al máximo a su hijo.
En su primera carrera, Luis Felipe, el alumno, superó al maestro, su padre. Él fue quien se robó todas las miradas de los bellanitas que acudieron a esta primer válida departamental de moto velocidad.