Desde enero de 2023 hasta junio de 2024, el Ejército de Liberación Nacional ha incumplido el cese al fuego en 268 ocasiones, mientras que los grupos del Estado Mayor de las Farc han violado este acuerdo en 619 ocasiones.
Estos datos que demuestran que el proyecto de la paz total del Gobierno nacional que no muestra rumbo ni claridad.
Después de la llegada de Gustavo Petro a la presidencia de la República, su primera orden fue empezar los acercamientos para retomar los diálogos con la guerrilla del ELN.
Le sugerimos: Solo un 34.6 % de colombianos aprueba gestión del presidente Gustavo Petro
Ahí se abrió la puerta para lo que sería la construcción, la paz total, la apuesta de un gobierno para negociar con los grupos ilegales más poderosos del país.
A la mitad de su gobierno, este proyecto de paz tiene más sombras que luces, pues aún, hay muchas aristas que no se han logrado despejar del todo.
De esos ocho procesos, solo tres formalizaron mesas de diálogo como lo son: el Sur de los Comuneros, un frente del ELN, el Estado Mayor Central de Iván Mordisco y, recientemente, segunda Marquetalia, pero han transitado serias crisis. Algunos grupos ya tienen disidencias, mientras que otros procesos están congelados desde hace meses.
Si bien con algunos grupos ilegales se han logrado avances históricos, también han quedado en evidencia cuellos de botella y desafíos jurídicos, políticos, de seguridad y de la voluntad de las organizaciones ilegales que no han permitido avanzar al ritmo esperado en los procesos de paz.
Las cifras recientes reflejan la magnitud del desafío que tiene el gobierno con la paz total.
Desde enero de 2023 hasta junio de 2024, el Ejército de Liberación Nacional ha incumplido el cese al fuego en 268 ocasiones, mientras que los grupos del Estado Mayor de las Farc han violado este acuerdo en 619 ocasiones. Estos datos evidencian que, a pesar de los esfuerzos de negociación, el panorama de la violencia en el país sigue siendo grave.