51 puntos críticos del Bajo Cauca antioqueño tendrían subestaciones de Policía. A esto se suma una intervención de tipo social con la construcción de escuelas y un plan de reforestación.
Robustecer la fuerza de tarea conjunta Aquiles es la primera decisión por parte de los gobiernos nacional y departamental para contrarrestar los hechos violentos de los últimos días en el Bajo Cauca antioqueño.
Con la intervención de 27 puntos críticos y la construcción de subestaciones de policía con recursos gestionados desde la oficina del alto comisionado para la paz, las autoridades intentarán devolverle la tranquilidad a los habitantes del Bajo Cauca antioqueño, especialmente del corregimiento El Guáimaro de Tarazá.
En otras 24 zonas de la subregión del norte de Antioquia, la fuerza de tarea conjunta Aquiles y un plan integral de intervención social, serán la estrategia de la Gobernación de Antioquia para intentar contrarrestar el accionar delictivo de grupos como los Caparros, Clan del Golfo y disidencias.
El Gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, anunció además la construcción de una nueva institución educativa en el corregimiento El Guáimaro.
En las zonas de intervención, la Alta Consejería Para la Paz también desarrollará programas de reforestación de hasta 15.000 hectáreas que servirán para contrarrestar cultivos ilícitos con modelos de ecodesarrollo sostenible.
