En septiembre de este año se completó un monitoreo que permitió establecer el estado de salud de los animales que se encuentran albergados en La Perla. El estudio estableció que de los mil 300 perros, 255 tenían la bacteria Brucella y 206 Leptospira, estos animales se encuentran aislados y sometidos a tratamiento, pero no representan riesgo de epidemia.