Bogotá, 31 dic (EFE).- El director de la Unidad de la Dirección Nacional de Gestión de Riesgo (UNGRD), Carlos Iván Márquez, calculó hoy que bajo el alud de tierra que cayó el sábado sobre una vía rural del sur del país deben permanecer atrapados dos o tres desaparecidos.
"Creemos que están entre unas dos o tres personas adicionales a las que ya hemos evacuado (dos fallecidos) y a los siete heridos que fueron evacuados y atendidos", dijo Márquez en declaraciones a Caracol Radio.
Según el director del UNGRD, que depende de la Presidencia, "el número de personas desaparecidas no se proyecta como el que se había reportado inicialmente el sábado por la tarde", que se había fijado entre 20 y 25.
En la tarde del sábado pasado se desprendió de una montaña una masa de entre 8.000 y 10.000 metros cúbicos que cayeron sobre una vía rural por la que transitaban autobuses y vehículos particulares entre las ciudades de Neiva y San Vicente del Caguán, en el sur de Colombia.
El alud tiene una extensión lineal de unos 250 metros, en los que las autoridades calculan que debieron quedar apresados unos siete automóviles.
Pero según los relatos de testigos, algunos pasajeros salieron de los vehículos al ver cómo se precipitaban las tierras y rocas sobre la carretera, y se ubicaron en un lugar seguro; incluidos los viajeros de un autobús con capacidad para 40 personas.
"Hasta ayer en las horas de la tarde se lograron ubicar y extraer dos cuerpos que ya están en manos de las autoridades competentes y se ha mantenido toda una coordinación con los familiares de los desaparecidos", señaló.
Tres familias se han puesto en contacto con las autoridades para reportar la desaparición de sus seres queridos, lo que según la Policía deberían hacer todas aquellas personas que se encuentren en una situación similar para ayudar también a recomponer los hechos.
"Algunos (desaparecidos) pueden estar cerca del la vía que fue ocluida (...). En esa línea de ubicaciones se está trabajando, se está haciendo triangulación sobre el terreno y sobre esa base de acuerdo a esos esquemas se tienen perros de búsqueda", explicó Márquez.
En este momento, continúan las labores de remoción de escombros e incluso "ya se están ubicando algunos vehículos como las retroexcavadoras que están en la parte inferior y los otros en los que se ha ido avanzando de acuerdo a las condiciones que ha dado el terreno", agregó.
Ante la inestabilidad del terreno, las autoridades mantienen un permanente "monitoreo en parte alta y aledaños", de acuerdo a Márquez.
En la zona, conocida como Balsillas, hay más de 300 trabajadores de los bomberos, la Cruz Roja, la Defensa Civil, la Policía, el Ejército, el UNGRD y su filial regional, quienes seguirán desarrollando las labores de rescate que contempla la medida de "calamidad pública" que fue declarada ayer.
