La creciente súbita de la quebrada Cañada Negra ya cobró la vida de nueve personas, la mayoría de ellas del sector El Diamante del barrio El Pinar de Bello.
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“El estruendo que se sintió fue muy tremendo y me levanté pensando que estaba lloviendo, sino que la quebrada que venía zumbando de ahí para abajo, entonces nos salimos, salimos a la carretera”, contó Carlos Arturo Marín Atehortúa, afectado.
A hospitales han sido remitidos ocho heridos y hay un número indeterminado de desaparecidos.
“Todavía los equipos hacen las valoraciones de lo que está pasando y hay todo un personal de organismos de socorro, psicosocial, atendiendo a las víctimas y siguiendo en la búsqueda de las personas que presumimos fueron atrapadas en este alud de tierra”, indicó el gobernador Andrés Julián Rendón.
Esta quebrada es el límite de Medellín y Bello. Para mitigar posibles riesgos sobre la infraestructura, EPM suspendió el servicio de acueducto para 15.015 usuarios de los barrios Versalles, La Cruz, Oriente, El Raizal, Carpinelo, San José La Cima, La Avanzada, María Cano-Carambolas, La Salle, El Compromiso, La Esperanza, Bello Oriente, La Cruz, La Honda y Versalles.