La cancelación de procesiones y celebraciones litúrgicas con asistencia de público durante la Semana Santa como consecuencia de la pandemia, también ha afectado a la iglesia católica que dejó de percibir dinero producto de las ofrendas que se incrementa por esta época.
Por eso, pidió ser solidarios con la iglesia pero sobre todo con las personas que más nos necesitan por estos días. Cifras entregadas en 2018 por el DANE revelan que la pobreza monetaria fue del 27,0% y la pobreza extrema fue 7,2% en todo el territorio nacional
