El 13 de noviembre de 1985, hace 37 años, marcó la historia de Armero y de Colombia. Una tragedia enlutaba al país después de la erupción del volcán Nevado del Ruiz donde perdieron la vida más de 25 mil personas.
Una avalancha de lodo, agua, piedras y escombros arrasó con 4.200 viviendas en Armero (Tolima), y afectó también a Chinchiná y Villamaría en Caldas.
Los rostros de esa tragedia siguen en la memoria de los colombianos, uno de ellos el de la pequeña Omaira Sánchez, quién quedó atrapada en los escombros de su casa y pese a las labores de rescate por parte de los organismos de socorro, no pudo ser rescatada y murió.
En el marco de la conmemoración de los 37 años, la alcaldía municipal compartió la programación con las actividades, entre las cuales está la celebración de una misa presidida por Monseñor José Luis Henao Cadavid, obispo de la Diócesis de Líbano-Honda.
También se realizó una ofrenda floral y la alcaldesa de lo que se conoce como Nuevo Armero, Cristina María Perdomo mencionó que la Fuerza Aérea Colombia haría una lluvia de flores sobre el antiguo Armero.
Desde el Servicio Geológico Colombiano se monitorea de forma permanente y se le hace un seguimiento a la actividad del Complejo Volcánico con equipos modernos que puedan identificar cualquier alteración en los niveles y generar una alerta a tiempo.
El SGC conmemora los 37 años de la erupción del Volcán Nevado del Ruiz.
De manera especial rinde tributo a las personas que perdieron la vida en la desaparecida Armero y en Villamaría y Chinchiná, solidaridad con los allegados de quienes ya no están y los sobrevivientes. pic.twitter.com/ofgIfb0JGv
— Servicio Geológico (@sgcol) November 13, 2022