El aumento de conexiones móviles y de líneas telefónicas no va al ritmo de la instalación de las antenas de telecomunicaciones que cada vez son más difíciles de instalar debido a la oposición de los ciudadanos.
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Aunque en muchos casos el uso del suelo lo permite, la comunidad es quien se opone y no acepta la instalación de infraestructura necesaria para mejorar las telecomunicaciones.
Los operadores advierten que el problema es que cada municipio tiene su POT y no hay una regulación nacional en el uso del suelo para la instalación de las antenas de telecomunicaciones. Sabaneta y La Estrella son dos de los que más problemas tienen.
Para la aprobación de esa infraestructura en conjuntos residenciales se deben cumplir ciertos requisitos.
En Colombia se estima se necesitan entre 7 mil y 10 mil antenas de telecomunicaciones.