Tener el espacio adecuado, la disponibilidad de tiempo y una estabilidad económica son algunos de los requisitos que se exigen al momento de adoptar una mascota en albergues y corporaciones. Con visitas, certificados y formularios se comprueba que efectivamente los adoptantes cumplan con esas condiciones, sin embargo a muchos les molesta, se quejan y prefieren renunciar a la adopción.
Y es que un gran porcentaje de los animales que son entregados en adopción son devueltos semanas o meses después cuando los propietarios se mudan de sitio o simplemente se aburren con la mascota.
Los animalistas invitan a quienes no están de acuerdo con la formalidad a que adopten animales que encuentren desamparados en las calles.
El llamado por estos días también es a los albergues a que no entreguen en adopción gatos blancos o negros, pues recordemos que en octubre pueden ser utilizados para rituales satánicos.