Beirut, (EFE).- Al menos dieciocho personas murieron hoy, entre ellas diez menores, y varias resultaron heridas en un bombardeo contra una escuela de Alepo, la mayor localidad del norte de Siria, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Aviones militares atacaron el barrio de Al Ansari Oriental, donde se ubica el colegio Ain Yalut, en el que perecieron las víctimas.
La ONG no descartó que el número de fallecidos pueda aumentar debido a la gravedad de algunos de los heridos.
Un vídeo grabado por activistas mostró imágenes de los destrozos causados en la escuela, donde podía apreciarse a los equipos de rescate trabajando entre los escombros.
La grabación enseña un pasillo del inmueble, con la paredes decoradas con personajes de Disney y con el suelo completamente cubierto de mobiliario escolar destruido y con restos de sangre.
Un miembro de los equipos de socorro explica en el vídeo que sobre las 08.45 hora local (05.45 hora GMT) los aviones atacaron uno de los edificios del colegio y que diez minutos después alcanzaron otro de los bloques.
Por otro lado, el Observatorio agregó que helicópteros del Ejército lanzaron barriles de explosivos contra zonas del distrito de Hanano, en la misma Alepo.
El lunes, los rebeldes islamistas restablecieron el suministro eléctrico en la ciudad, que estuvo cortado durante diez días, como medida de presión para que el régimen dejara de bombardear con barriles de explosivos.
El Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda, explicó que decidió restablecer el suministro por "el sufrimiento de la población en las áreas en manos del régimen".
El grupo subrayó que lo hizo en cumplimiento de "una iniciativa de principios que exige el fin de los bombardeos contra los civiles y por un periodo de prueba para ver si el régimen lo cumple" y advirtió a las fuerzas gubernamentales de que su respuesta sería más dura si volvían a bombardear Alepo.
Esta población fue blanco de una gran ofensiva de la oposición a finales de julio de 2012 y de otras operaciones importantes posteriores, lo que permitió a los rebeldes dominar amplias zonas de la urbe, aunque no logró controlarla del todo.
