Rechazo ha generado en el municipio de Bello la agresión que recibió un operario de aseo por parte de un ciudadano que solicitaba el traslado de un elemento voluminoso. El hecho ocurrió en el barrio Araucarias.
El funcionario de la empresa Bello Aseo, amparado a la normativa de la compañía, se abstuvo en recolectar unos residuos voluminosos. Tras recibir una respuesta negativa del colaborador, el ciudadano reaccionó agrediéndolo con un arma de fuego.
“Solicita al operario que le realice la recolección de unos elementos voluminosos, que por sus características no van dentro de ese vehículo, los operarios se rehúsan a hacer la actividad porque, primero, va en contra de la recolección en el proceso normal que se realiza y, segundo, porque ese tipo de residuos puede dañar el vehículo. A la persona no le gusta esa respuesta negativa y lo que hace es agresión al operario”, indicó William Pérez, director administrativo de Bello Aseo.
El recolector de residuos, víctima de agresión, tuvo que ser trasladado a un hospital al recibir lesiones en su cabeza y tiene una incapacidad de dos días.
Pérez confirmó que se emprenderán acciones legales en contra del ciudadano que protagonizó la agresión.
“La empresa está realizando, primero la indagación interna a operarios, personal para mirar qué tipo de acciones, en los próximos días ya se va a revisar con el área de gerencia qué acciones la empresa va a tomar en contra de este usuario en particular”, agregó el director administrativo.
Este es el primer caso de intolerancia que reporta la compañía hacia uno de sus funcionarios. Instan a los usuarios a que se solicite la recolección de elementos voluminoso en las líneas establecidas.
